Aunque no propiamente en Ámsterdam pero sí bastante cerca (a unos 10 kilómetros al noroeste para ser más exactos), nos encontraremos con una pequeña población llamada Zaanse Schans la cual aún siendo algo pequeña provoca un gran interés debido a que posee algunos de los mejores molinos de viento en Ámsterdam rodeados por un paisaje tradicional.
Cada año durante el segundo sábado del mes de mayo, Holanda celebra con total orgullo el día de los molinos de viento, esto puede acercarnos un poco a comprender lo mucho que representan para su cultura y lo mal que estaría no incluirlos dentro de un recorrido turístico por esta tierra.
Muchos se refieren a esta aldea como el pueblo de los molinos de viento, así que veamos con mayor detalle lo que puedes esperar si decides conocerlo a fondo.
Visitar Zaanse Schans
Al llegar parece que vuelas en el tiempo y aterrizas aproximadamente en el siglo XVIII, el ambiente es engalanado por pequeñas casas de madera en tonos verdes y el río Zaan hace su aparición para permitir la panorámica de lo que tanto has esperado: los molinos, que aunque ya quedan muy pocos algunos aún continúan funcionando y brindan ese paisaje que tanto vemos en las fotografías.
Podré¡s recrearte un poco más contemplando algunos de sus pequeños puentes, una fábrica de quesos, otra de zuecos y consumiendo alimentos en alguno de sus restaurantes. Su ambiente tranquilo y pausado lo convierten en una excursión amena y llena de pequeños descubrimientos.